El medio blog

Un medio dedicado a los medios.

Friday, November 14, 2008

La prensa y la tía
Por Alfredo Sepúlveda

Confieso que el asesinato del joven economista Diego Schmidt–Hebbel me tiene medio obsesionado. Algo que me llama la atención es el tratamiento de la información. La versión del calvo homicida confeso se ha convertido en verdad revelada. Y el tipo no es muy confiable que digamos. Es un delincuente que mata gente a plena luz de día.

Lo que no quiere decir que Pilar Pérez sea automáticamente inocente. No estoy diciendo eso. De hecho, la prensa ha entregado dos antecedentes que sustentan en parte lo que señala el asesino. Han recogido la historia del crimen Francisco Zamorano, el ex marido gay de Pilar Pérez y padre de sus hijos, y la historia de que ya en 2002 hubo una denuncia en contra de Pérez en el 17º Juzgado del Crimen: su ex pareja, un arquitecto llamado Carlos Felip, la acusó de haber contratado un sicario para matarlo.

La denuncia existió y fue investigada sin llegar a conclusiones. Lo que sabemos del caso lo sabemos por una hermana de Felip y por el propio arquitecto, que según El Mercurio reveló detalles del caso a los fiscales. La hermana de Felip da montos: $500.000, y dice que el sicario se quedó con la plata y le confesó todo a su eventual víctima. “Por suerte, el asesino que consiguió se arrepintió y me confesó el plan”, dice El Mercurio que Felip le dijo a los fiscales. Lo raro es que el sicario se haya acercado a su víctima a contarle sus planes. ¿No era más simple quedarse con la plata y desaparecer? Tal vez podría ser una forma de protegerse de su supuesta clienta, generar una denuncia y cuidar sus quinientas lucas.

Pero lo realmente extraño de esta versión es una cita de Felip a los fiscales, recogida por El Mercurio: “Ella supo que (yo) quería terminar y acudió a un funcionario de Gobierno para contarle que me prefería muerto, por lo que necesitaba un sicario”. Las cursivas son mías y la cita ha pasado coladísima. ¿Un funcionario de gobierno? ¿Para que se consiguiera el sicario o para que ejecutara a Felip? ¿Qué funcionario? Recordemos que Felip no ha hablado con la prensa y que esta versión es indirectísima. Pero por lo mismo es algo que al menos merece ser aclarado en un diálogo con Felip.

Veamos ahora la variante del asesinato de Francisco Zamorano (ex marido) y su pareja, Héctor Arévalo, en abril. El autor confeso –aunque después se arrepintió– fue el primo y arrendador de Zamorano. Semanas después del hecho, el fiscal recibió un mail anónimo en que se pedía que se investigara a Pilar Pérez. La brigada del Cibercrimen rastreó el e–mail a una dirección IP de Estados Unidos (entiendo que no es necesaria a la brigada para eso). Pilar Pérez efectivamente declaró ante el fiscal por el crimen de su ex marido, pero el fiscal llegó a la conclusión de que no estaba involucrada. ¿Sabía el fiscal de la primera denuncia (la de Felip en 2002) al descartar la participación de Pérez en el crimen de Zamorano? ¿Habrá sido Felip el autor del mail anónimo?

El fiscal a cargo del caso Zamorano ha dicho que ya antes del mail, familiares de las víctimas y testigos se habían referido a Pérez, y que por eso la investigó, lo que daría pie para pensar que hay dos vertientes, independientes, que ligan a Pilar Pérez con historias previas de contratación de sicarios. Pero ¿qué “familiares de las víctimas y testigos” son los que hablaron con el fiscal? ¿Están relacionados ellos con la denuncia de Felip en 2002? Si fuera así, toda la historia de Pérez como contratadora de sicarios, provendría de una sola fuente: Felip.

No me las quiero dar de Sherlock Holmes aquí. Los antecedentes contra Pilar Pérez son fuertes. El hecho de haber ingerido las pastillas después de la muerte de Diego Schmidt–Hebbel no le da precisamente una pátina de inocencia. La denuncia de haber golpeado a su nuera en 2007, confirmada a El Mercurio por el hijo de Pilar Pérez, tampoco juega a su favor.

Pero el punto es que creo que desde los medios, arreglar el problema de la presunción de inocencia de una persona solo anteponiendo la palabra “supuesta” o “ eventual”, o usando verbos en condicional todo el tiempo, no basta.

Wednesday, November 12, 2008

Cuicos o flaites
Por Alfredo Sepúlveda

El blog de El Mercurio que discute sobre el asesinato del joven Diego Schmidt–Hebbel por un sicario contratado por la tía de su novia para matar al suegro del joven, se presta para hablard e varios temas: uno, es la ya clásica dicotomía de la prensa para tratar los hechos de sangre ocurridos en los estratos mas adinerados frente a aquellos en que las víctimas son pobres. Otro es la utilización política que se hace de la tragedia, (la presencia del candidato Sebastián Piñera en el velatorio es vista como un síntoma de ello). También se debate, aunque en menor grado, sobre la conveniencia de reinstalar la pena de muerte.

Pero la discusión más interesante, la que más dice sobre nuestros padecimientos e ideas como sociedad, es en torno a la división de clases. Un “bando” de comentaristas postula que la acción criminal de la tía tiñe a toda la familia de la novia… novia incluida. Y encuentra eco: hombres enojados y madres atemorizadas, avalan esta idea. Es peligroso “meterse con la gente equivocada”, digamos.

Este temor, atávico en Chile, aparece en gloria y majestad en este intercambio de ideas.

La familia de la novia, con más o menos matices, sostienen estos comentaristas, sería una familia de “flaites”. O al menos, una de un nivel inferior a la de la familia del joven asesinado y a la de los propios comentaristas , y aquí pongo una muestra de los comentarios, tal cual aparecen publicados en el blog:

Rodrigo P.B, en el post 2, comienza el debate: “Me gustaría ahora saber qué van a decir todos aquellos que ayer gritaban enfurecidos contra la delincuencia de los flaites…”

Patricia Galassi le retruca: “Yo sigo pensando lo mismo….el desgraciado que lo mato es un ladron y flaite tambien…. la Tia debe ser de mismas…”, aunque después condena la delincuencia “venga de donde venga”.

Pero es Pedro Perez quien en el post 15 abre el flanco hacia la familia de la novia, e incluye a la muchacha: “Quiero escuchar de nuevo a la novia del pobre difunto, que de seguro debió haber dicho: “Contigo siempre me sentí segura y me defendiste con tu vida ante el sicario que contrato la hermana de mi padre” Lo siento pero ahora ya me choca la famosa novia.”

Ricardo Flores en el post siguiente retruca: “Cada nueva información solo suma pena a la ya enorme que siente la familia de Diego, y de una manera especialmente cruel a María Belén que sin tener responsabilidad debió ver el ataque y ahora enfrentar que todo este dolor se origino de disputas viejas en su propia familia”.

Alvaro Sotta, lanza de frentón la teoría del “contagio flaite” hacia la familia de la novia: “Lamentable. Lo que no logro entender es porque el fallecido Diego se metio con gente tan rasca y peliente (sic). Bueno, ojala que sirva de leccion para muchos. No hay que meterse con flaites”.

Federico García, post 23, le responde duramente: “Impactante tu post. Espero nunca tengas familia ni a nadie a quien transmitirle tus “valores”.”

Patricia Galassi en el post 39, pone el límite a la teoría del “flaitismo” de delincuente y tía, para salvar a la novia: “La familia uno no la elije se la imponen, no se puede saber de quien uno se va enamorar o se va relacionar en esta vida….”

María Silva, en el post 46, reacciona a favor de la familia de la novia: “Creo que no corresponde tratar de ” flaites” a la familia de esta niÑa”.

El comentario 52, de Fernando Baradit, no sé cómo clasificarlo. Puede ser una ironía. Puede que no: “No corresponde tratar de “flaites” a la familia de la novia de la víctima. Sólo pareciera que la tia mandó matar a su papá pagando $500.000. Pero no creo que sea “flaite”.”

Alexander Medel, post 54: “Señor Klaus Schmidt-Hebbel ahora los flaites y delincuentes tienen nombre y apellido”.

Jorge Miholovic (post 60): “Parece que el infortunado muchacho se relacionó con quienes no debía; también está la posibilidad que no supiera el tipo de “negocios” familiares de sus eventuales suegros”. Parece no importar que el suegro pudo haber sido la víctima.

Ìtalo de Barbieri (post 80) se da más vueltas para decir lo mismo: “no me corresponde decir si la familia es o no cuica o flaite, solo lo siguiente: El exmarido de la asesina intelectual, muere con su novio a manos de su primo(sic) Ella (la asesina)paga y manda a matar al marido de su hermana, sucediendo lo que todos sabemos. Lo que me queda claro es que la semilla de maldad y de lo turbio reinaba en esa Familia.”

Javier Rivera Martínez (post 83), también es del bando que considera que los pecados de la tía condenan a la familia, aunque, digamos, bastante más radical en su propuesta: “intuyo un desconocimiento total de quienes serían la futura familia política, ya que esta llena de ajusticiamientos, homosexualidad, separaciones, asesinatos, estafas, etc,etc,etc. Quizás ella jamás le comentó los dramas de su familia, quizás él era tan bueno que no le importaba, quizás ella era tan buena que valía todo eso y mucho más.

Bueno ya es tarde, moraleja júntate con tus pares minimiza los riesgos. Flaites con Flaites // Cuicos con Cuicos // Clase Media con Clase Media.”

Pamela Valenzuela (post 87) tampoco está por la inclusión: “Creo que Diego jamas debió involucrarse con esa familia con tantos conflictos. A cada minuto sabemos mas: ahora la tia parece que tambien estuvo involucrada en el asesinato de otras dos personas. este año. Que nos sirva a los padres como leccion: tenemos que conocer a los padres de las pololas y pololos de nuestros hijos, invitarlos a conversar a nuestra casa, averiguar más de su entorno familiar. Aunque nos digan que nos estamos involucrando mas de la cuenta, es preciso, para protegerlos”.

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